Escribir el post de los domingos me gusta especialmente porque me ayuda a desconectar del día a día y del los temas del trabajo, pero que sea un amigo el que comparta aquí un trocito de sí mismo hace que me guste más. Ésto hace que la entrada dominical sea, si cabe, aún más especial todavía. Y de nuevo hoy toca entrada especial.
Todos tenemos sueños y todos deseamos cumplirlos. Unas veces se puede pero otras no. No depende sólo de nosotros y nuestros sueños, por muy fuerte que soñemos, se quedan sólo en eso, en sueños. Lo que es evidente (aunque a veces, muy pocas, pueda ocurrir lo contrario) es que esos sueños no se van a cumplir si nosotros no hacemos nada por intentar conseguirlos. Y entre estas batallas (algunas ganadas y otras perdidas) se nos pasa la vida, persiguiendo sueños, cumpliendo algunos y anhelando otros. Viviendo al fin y al cabo...
Todos tenemos sueños y todos deseamos cumplirlos. Unas veces se puede pero otras no. No depende sólo de nosotros y nuestros sueños, por muy fuerte que soñemos, se quedan sólo en eso, en sueños. Lo que es evidente (aunque a veces, muy pocas, pueda ocurrir lo contrario) es que esos sueños no se van a cumplir si nosotros no hacemos nada por intentar conseguirlos. Y entre estas batallas (algunas ganadas y otras perdidas) se nos pasa la vida, persiguiendo sueños, cumpliendo algunos y anhelando otros. Viviendo al fin y al cabo...
"Existen derrotas, pero nadie está a salvo de ellas. Por eso es mejor perder algunos combates en la lucha por nuestros sueños que ser derrotados sin siquiera saber por qué se está luchando". (Paulo Coelho).
Y sin dar más vueltas quiero agradecer la entrada de hoy a Miguel, que explica de maravilla su selección y que me lo ha puesto muy fácil buscando hasta los enlaces. Gracias por tus recomendaciones, por tu tiempo y sobre todo, por ser amigo. Hoy la pildorita 2.0 pasa a ser la pildorita con cosas, de Miguel A. Máñez.
La película. La sensación de encontrarse en un país lejano, con un idioma diferente, es algo que ayuda a sentirse vivo, a ver las cosas desde lejos y a observar la vida con un nuevo cristal, limpio, sin influencias. Y una película que refleja perfectamente esa sensación es Lost in Translation de Sofia Coppola.
Y si hay un protagonista en la película, además de la cultura japonesa, es la banda sonora, con temazos de Phoenix, Air, The Jesus and Mary Chain o My Bloody Valentine, además de las canciones de Kevin Shields. En ese entorno, se mueven los personajes de Bill Murray (el protagonista del mítico anuncio del whisky Suntory) y Scarlett Johansson que demuestran que los polos opuestos (de todo tipo) acaban atrayéndose y que las piezas encajan, sobre todo cuando hay ganas de aprender, de mejorar, de crecer.
(El enlace original que recomendó Miguel A. es Alone in Kyoto, pero es imposible insertarlo, por eso lo enlazo así. No os lo perdáis, es uno de los momentos mágicos de esta película).
(El enlace original que recomendó Miguel A. es Alone in Kyoto, pero es imposible insertarlo, por eso lo enlazo así. No os lo perdáis, es uno de los momentos mágicos de esta película).
El libro. Un libro de perdedores y de luchadores, de gente que persigue sueños, de catástrofes cotidianas y de reencuentros en un New Orleans que parece un pañuelo. Restos de odio plasmados en cuadernos azules, filosofía barata para grandes momentos, experiencias laborales más que kafkianas y situaciones tan excéntricas y poco creíbles que casi parecen reales. El libro elegido se llama La conjura de los necios, de John Kennedy Toole.
La propia historia de la publicación del libro parece un guión, pero lo más interesante de la novela es buscar a los Mancuso, Myrna o Ignatius a nuestro alrededor. Un trozo de realidad con forma de novela, un trozo de vida, de lectura imprescindible.
La canción. Aunque hay cientos de canciones imprescindibles, siguiendo con la estela del libro, hoy elegimos Grace, del mítico Jeff Buckley. Un cantante que bien podría haber pertenecido al club de los 27 por las extrañas circunstancias de su muerte, pero Jeff tenía 30 años cuando se ahogó mientras nadaba en un río.
Grace es una canción que crece lentamente, con la voz y la guitarra como verdaderas protagonistas, y que pese a su regusto melancólico, ofrece un mensaje muy positivo y directo: olvida el miedo a la hora de dar pasos que pueden cambiar tu vida. Como el mismo Jeff Buckley dijo en directo: "Trata sobre no sentirse tan mal por la propia moralidad cuando se encuentra el verdadero amor".
Feliz domingo para todos.
La propia historia de la publicación del libro parece un guión, pero lo más interesante de la novela es buscar a los Mancuso, Myrna o Ignatius a nuestro alrededor. Un trozo de realidad con forma de novela, un trozo de vida, de lectura imprescindible.
(Y a lo que dice Miguel le añado una frase ligada al libro, de hecho, casi casi le da título: “Cuando en el mundo aparece un verdadero genio, puede identificársele por este signo: todos los necios se conjuran contra él” Es una frase de Jonathan Swift citada en este libro.)
La canción. Aunque hay cientos de canciones imprescindibles, siguiendo con la estela del libro, hoy elegimos Grace, del mítico Jeff Buckley. Un cantante que bien podría haber pertenecido al club de los 27 por las extrañas circunstancias de su muerte, pero Jeff tenía 30 años cuando se ahogó mientras nadaba en un río.
Grace es una canción que crece lentamente, con la voz y la guitarra como verdaderas protagonistas, y que pese a su regusto melancólico, ofrece un mensaje muy positivo y directo: olvida el miedo a la hora de dar pasos que pueden cambiar tu vida. Como el mismo Jeff Buckley dijo en directo: "Trata sobre no sentirse tan mal por la propia moralidad cuando se encuentra el verdadero amor".
Feliz domingo para todos.
Menudo lujo poder pasearme un poco por tu blog... Gracias :)
ResponderEliminarMenudo lujo que hayas venido. Gracias a ti y vuelve cuando quieras!
ResponderEliminar